‘Quienes han abandonado a la gente son nuestros dirigentes’ Juan Royo economista y profesor de la Universidad de Zaragoza
Juan Royo es economista y crítico de cómic. También es profesor de la Universidad de Zaragoza e investigador asociado de ECODES. Ayer estuvo en la Universidad de La Rioja participando en el ciclo ‘Los Jueves de la Facultad de Empresariales’ para hablar de Economía desde una perspectiva diferente, la que ofrece el mundo del cómic tanto como herramienta pedagógica como trama argumental. ‘Cómic de economía, economía de cómic’./Javi Muro
S.- ¿Qué cuenta cuando habla de ‘Cómic de economía, economía de cómic?
Hablo de conceptos económicos que se pueden entender de una manera más simple a través del cómic. Lo que pretendo es dignificar un poco el mundo del comic porque mucha gente piensa que es algo para niños. Lo que quiero es demostrar que hay muchas ideas y conceptos que se pueden estudiar a través del mundo del cómic. Luego, lógicamente, una vez que los has descubierto a través del cómic, que los has leído en una novela gráfica, profundizas en libros de texto, programas, etc…
S.- Conceptos… ¿Cómo…?
Conceptos cómo la prima de riesgo, el déficit público, el superávit, la deuda pública…
S.- ¿El cómic, sus técnicas narrativas, ofrecen esa posibilidad?
Claro, claro. Es que la economía tiene dos aspectos dentro del cómic. Uno, como argumento y otro como herramienta pedagógica. Por ejemplo, la quiebra de Wall Street es un argumento muy atractivo que, de la misma manera que se ha llevado al cine, también se ha llevado al cómic. Incluso Los Pitufos han hablado de economía en ‘El pitufo financiero’. Hay muchos cómics que te enseñan ese tipo de conceptos sobre todo de forma satírica. El más claro es Aleix Saló, que escribió un cómic titulado ‘Españistán’, que surge de la unión de España y Afganistán. También ha escrito otros títulos como ‘Simiocracia’ y ‘Europesadilla’. Saló lo que hace es hablar de cómo hemos llegado hasta este estado de cosas. Es un dibujante de cómics que ha profundizado en estos temas.
S.- La economía está desde hace años en primera página y poco a poco también se habla más de la novela gráfica…
Sí, pero creo que la presencia de la novela gráfica como noticia es más cualitativa que cuantitativa. El problema de España es que no hay una cultura de cómic como la que existe en Francia o en Bélgica. Cuando a tu mujer le regalas algo es un perfume, un disco o un libro, pero no se te ocurre regalarle un cómic; eso es una cosa un poco más rara aún. Creo que aún falta mucho para que exista una industria en España del cómic… pero bueno, es cierto que se está avanzando. El cómic digital, por ejemplo, también permite avanzar mucho en este aspecto porque abarata los costes. El problema de España es más de demanda que de oferta. Creo que existen dibujantes de cómics buenísimos que trabajan para el extranjero y que están muy reconocidos, pero en España no hay lectores de cómic suficientes todavía.
S.- Y hablando de industria y de economía, ¿Cuál es la situación económica hoy en día?
Bueno, ahora estamos con que el problema es la austeridad y no, el problema no ha sido la austeridad, el problema ha sido el despilfarro. El problema ha sido construir infraestructuras inservibles, crear viviendas que iban a estar vacías, el problema ha sido el endeudamiento excesivo de familias y de empresas. La austeridad es ahora la consecuencia y única alternativa fácil para disminuir la prima de riesgo que era el verdadero drama. Un drama que consistía en que no conseguías continuar financiándote a unos precios aceptables. Una economía como la de España está gripada; con una economía con déficit y con la deuda que tenemos es muy difícil salir adelante.
S.- Entonces, ¿estamos saliendo o no?
Que vamos a estar saliendo. A lo mejor sí es cierto que hemos tocado fondo y que los que afortunadamente tienen trabajo, a lo mejor, ya no lo van a perder. El problema es qué hacemos con todas las personas que están en el paro. Es una situación muy difícil de resolver.
S.- ¿La economía ha abandonado a la gente?
Quienes han abandonado a la gente han sido nuestros dirigentes; los que han tirado el dinero y nos han endeudado, esos son los que han abandonado a la gente. Los que han vendido preferentes a mansalva esos son los que han abandonado a la gente. Los líderes, los que se ponían las medallas cuando todo iba bien esos son los que han abandonado a la gente.
S.- Hoy se podía leer en la prensa las palabras de la presidenta del FMI pidiendo al Banco Europeo más medidas porque la recuperación es muy frágil. ¿Es muy frágil?
Bueno, Christine Lagarde tampoco puede hablar mucho… es que al final… Es que los cambios que se necesitan son estructurales… si todo el mundo trabajaba en la construcción, si todo el mundo trabajaba en el sector bancario, ¿cuántas oficinas bancarias había?… ¿Cómo recolocamos a toda esa gente?… Las tecnologías te ayudan, la formación te ayuda, pero… la flexibilización de las medidas laborales ayuda, pero el mayor número de crecimiento del empleo ha venido, lógicamente, por los autónomos. Los autónomos tienen una fuerza muy importante que aporta esa flexibilidad…
S.- Y si es tan importante la aportación de los autónomos, ¿es justa la forma en que tienen que tributar?
Es que yo creo que los autónomos es a quién se debiera mimar, porque son la base de la recuperación. Los autónomos son el paradigma de la flexibilidad, frente a la precarización de la jornada laboral el autónomo tiene capacidad de decidir trabajar en aquello que quiere o de organizarse su tiempo.
S.- ¿Y qué medidas se pueden tomar en el momento en que estamos?
Lo que hay que tener en cuenta es que estamos todos de resaca porque nos pegamos una borrachera fabulosa hasta el año 2008, las instituciones públicas, las empresas, las familias… todo el mundo… estamos de resaca… ¿medidas a tomar? Apoyar a los autónomos, a la creación de empresas… ¿Problema? Que la Administración pública poco margen de maniobra tiene porque el sector público ha disminuido su influencia en la economía, antes podías hacerlo a través de empresas que eran públicas como Telefónica, Argentaria antes de ser BBVA, Iberia, Endesa… ahora ya no existe esa capacidad. ¿Qué van a hacer? ¿Subir impuestos? ¿Bajar gastos? Una buena medida sería meter en la cárcel a todos los que han robado el dinero y a todos los implicados en casos de corrupción, dar ejemplo. Esa podía ser la primera medida.
S.- No le veo muy optimista…
Al final, todo está en la ética, en los principios, porque lo que ha quedado demostrado es que lo que no funciona es el estricto funcionamiento financiero de los mercados.
*Ilustración: Juan Royo/Blade Runner. Del blog de Juan Royo.